martes, 30 de octubre de 2007

Habemus Ikeam

Hace unas tres horas abrió el Ikea de Málaga. Una locura: la gente apostada para ser los primeros en entrar desde anoche, todo el mundo expectante y, terror, se prevé el colapso total de la carretera que lleva al Ikea y que, además, lleva a casi casi cualquier sitio: Torremolinos, Benalmádena y demás, aeropuerto, playas, centros comerciales y polígamos industriales. Una maravilla, vamos.
Es curioso que quien se anuncia como "la república independiente de tu casa" termine instaurando una dictadura en materia de decoración. Viva la homogeneización del hogar, diría yo. Pero, por si acaso, no hablaré mucho en su contra, que me conozco y sé que soy carne de Ikea.
En cualquier caso, lo recibo ahora mismo con tambores destemplados, porque creo que no llega en el mejor momento para el tráfico de Málaga. Y me ha gustado mucho (es irónico) la (vana) esperanza de las autoridades y el propio Ikea: Confían que mucha gente vaya allí en transporte público, y para ello ofrecen un descuento del 20 % en servicio de envío a domicilio. Un ofertón que nadie puede dejar escapar, vamos. Y, como aquí el coche no nos gusta apenas, no, seguro que todo el mundo irá allí en Cercanías y los aparcamientos estarán vacíos vacíos. Estoy convencido de que si el teletransporte fuera gratuito seguiríamos yendo en coche a todos lados...
¡Saludos!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Cosa que tienen que inventar a la voz de ya. El teletransporte, digo.

Yorch dijo...

¡Lo suscribo, Danilac! Y si hace falta me ofrezco como voluntario para experimentarlo.